El reemplazo de madres en la granja porcicultora, es un procedimiento que asegura la provisión constante de nuevos cerdos que se incorporan a la crianza. Para escoger las mejores hembras se debe tener en cuenta varios parámetros que expondremos a continuación.
La crianza de madres de reemplazo es el procedimiento con el que se cría a las futuras reproductoras de la granja porcícola. Este proceso se lo debe hacer siguiendo un riguroso control basado en los desempeños reproductivos, ya que son la base para obtener una genética hiperprolífica que logre grandes resultados reproductivos.
La tasa de reemplazo de madres es de, por lo menos, un 40% anual. Es decir, si tenemos 100 madres reproductoras, cada año habrá que reemplazar 40 de ellas a lo largo de todos los meses. Es importante tener en cuenta que cuando se descartan hembras, estas deben ser reemplazadas en el mismo número. Una de las causas más importante para descartar tempranamente una reproductora de la granja porcina tiene que ver con problemas locomotores, se debe ser muy exigente en la selección de las futuras reproductoras en cuanto a aplomos, conformación, estructura y solidez corporal.
Un mal manejo de la cerda de reemplazo no se ve de inmediato, su efecto se advierte en las etapas posteriores, es decir en la gestación y lactación. Esto compromete la eficiencia reproductiva de la granja porcina, pues generalmente las cerdas tienen que ser removidas del hato reproductor antes de llegar a su parto número cuatro.
Los problemas que se pueden presentar son los siguientes:
Evidente caída en segundo parto
Días no productivos
Bajo porcentaje de preñez
Baja cantidad de cerdos nacidos vivos por parto
Pérdida de reservas corporales
Alta tasa de desecho
Para que un proceso de reemplazo de madres sea exitoso, además de la selección, se debe tomar en cuenta que un buen plan alimenticio es la base de todo. La alimentación es esencial para llevar a la futura reproductora a un buen inicio de su vida productiva.
Por eso, PRONACA cuenta con varias fórmulas en su línea ProCerdos. Además, se debe realizar una cuarentena de las futuras madres. Las cerdas deberán ser alojadas en corrales fuera de las instalaciones del hato reproductor activo, ahí permanecerán por un periodo mínimo de 30 a 40 días.
En la cuarentena se deben cumplir los siguientes requisitos:
1. Las cerdas deberán ser alojadas en grupos de 8 a 10 por corral con un espacio mínimo de 1.50 metros² por cerda, los corrales deberán ser de piso de cemento con pendiente mayor o igual a 5%, sin irregularidades, para evitar posibles lesiones en cualquiera de los miembros anteriores o posteriores.
2. El ambiente deberá ser limpio, seco y lo más importante, con una excelente ventilación, ya que la zona termo neutral para primerizas es de 17 a 22Cº, es muy importante hacer esfuerzos por mantener a las cerdas dentro de este rango, ya que de no ser así se podría retrasar la presencia del primer celo e impactar de forma negativa la salud de las cerdas.
3. Evitar sistemas de enfriamiento que humedezcan los pisos, ya que esto puede ser perjudicial para la dureza de las pezuñas de las cerdas.
Una pregunta que realizan frecuentemente los pequeños productores, es si toda cerda puede ser productora.
Todos los animales son capaces de tener progeniae, la diferencia radica en el tiempo y resultados de eficiencia que se van a obtener. Las hembras de reemplazo son seleccionadas con las características específicas para reproducción, esto quiere decir, mayor número de lechones destetados por parto (>11 lechones), y buen peso al destete (>6kg) que depende directamente de la habilidad materna (cuidado y capacidad lechera de la hembra).